martes, 25 de junio de 2013

Mosca Abeja (Parageron incisus)


Este es uno de los primeros insectos que es posible observar, aún en pleno invierno, libando el néctar que ofrecen las primeras flores del año. 

Como muchos otros Dípteros posee un mimetismo batesiano. Este tipo de mimetismo ocurre cuando una especie inofensiva se asemejaba a otra peligrosa o repugnante y que con esto consigue eludir la acción de los depredadores. Este mecanismo de defensa pasiva, está especialmente desarrollado en las "moscas" pertenecientes a las familias Syrphidae y Bombilidae, cuyo aspecto imita el de abejas y avispas. 

Descripción de la especie:

Díptero de pequeño tamaño, máximo 1 cm de longitud. La hembra es algo mayor que el macho. Posee un aguijón en la cabeza que le confiere un aspecto peligroso aunque no lo son, este aguijón no es más que una trompa que usa para libar el néctar de las flores. De vuelo corto y grácil van desplazándose de flor en flor, buscando alimento.


Ojos compuestos separados, tórax de color pardo, con rayas longitudinales grises obscuro o negras. Abdomen negro con finas franjas de color blanco y con un tamaño igual a la mitad de la longitud total del insecto. Patas filiformes y alas algo ahumadas.

Distribución general:

Países mediterráneos de Europa. En la Península Ibérica ha sido citada en distintas provincias españolas y en Portugal sólo en el Algarve.

Hábitat:

Esta especie se encuentra fundamentalmente en zonas de matorral, herbazales y pastizales efímeros. Es fácilmente localizable en compuestas y geranios.

Comportamiento:

Los adultos de la especie son claramente florícolas, alimentándose de néctar. Pueden verse volando desde principios de Febrero hasta finales de Julio.

Sus larvas son predadoras o parásitas de otros insectos, alimentándose de orugas de mariposas nocturnas, puestas de huevos de saltamontes, larvas de abejas y avispas, huevos de arañas, e incluso algunos parasitan larvas de avispas y abejas que a su vez parasitan larvas de otros insectos (hiperparasitismo). Las fases larvarias de muchas de estas especies son poco conocidas.

Como mecanismo de defensa ante los depredadores usan el mimetismo batesiano, para parecerse a otras especies más peligrosas, como por ejemplo, las avispas y abejas. 










En:  granadanatural.com



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