Antes llamado alcaudón real (Lanius excubitor) y hoy convertido en alcaudón meridional (Lanius meridionalis), al detectarse ciertas diferencias con su homónimo del norte de Europa, el alcaudón norteño, es un ave que por su comportamiento, su pico ganchudo y sus pequeñas garras armadas con uñas poderosas para su tamaño, parece mas un pequeño halcón que un frágil pajarillo.
De hecho durante la Edad Media, se llegó a utilizar en la llamada Cetrería de salón, donde los presentes a la sesión, le soltaban pequeños pájaros y nuestro protagonista los cazaba al vuelo.
Su pico, de color negro, es fuerte y está diseñado para poder desgarrar algunas de las presas que captura. Su garganta es de color blanco y su vientre de suaves tonos grises y antifaz negro. Su cola es bastante larga, de color negro con bordes de color blanco. A menudo posado en lugares destacados como postes, arbustos, etc.
Su pico es largo, poderoso y ganchudo, puede capturar sus presas. Imita muchos sonidos para atraer a sus presas a las que inserta en arbustos espinosos como majuelos o piruétanos. Está presente todo el año. De vuelo ágil y rápido, es capaz de enfrentarse a otros pájaros de mayor porte y en ocasiones peligrosos para él.
El hábitat más característico de esta especie son los espacios abiertos, donde hay cierta cobertura vegetal, incluso árboles dispersos que suelen servirle de posaderos para otear el paisaje en busca de presas.
Llegado el mes de mayo, los alcaudones ya han comenzado a construir su nido en árboles y también en arbustos espinosos. Se trata de una taza herbácea donde habrá suficiente sitio para los cinco o seis huevos que serán incubados durante dos semanas principalmente por la hembra. Tras nacer los pollos serán alimentados durante tres semanas más en el nido.
Los [Alcaudón|alcaudones] se alimentan principalmente de roedores, pequeños pájaros, insectos y lagartijas. Una vez cazada la presa, suele dejarla sobre un espino para de esta manera facilitar su degustación.
El alcaudón suele posarse en postes de la luz, ramas de los árboles y lugares desde los que lanza un ataque sobre sus presas.
La época de cría comienza hacia el mes de abril o mayo. Macho y hembra incuban durante 15 días sus 5 o 6 huevos que por media ponen en cada puesta. Después de 19-20 días los pollos abandonan el nido que por lo general esta situado a una altura de unos 3-5m, aunque no es raro encontrarlos en matorrales espesos a menos de 1m del suelo y siempre muy escondidos dentro del árbol o matorral elegido.
Es también conocido el hecho de hacer sus nidos casi siempre en el mismo árbol, con lo que al paso de los años estos árboles pueden llegar a albergar hasta 5 o 6 nidos viejos.
Estos nidos de tamaño relativamente grande, parecidos a los de mirlo común (Turdus merula) están compuestos por pequeñas ramas entrelazadas pero sin llegar a ser demasiados compactos, y tapizados por material vegetal y plumas de otras aves.
Debido a su reducido tamaño, sus garras no tienen suficiente fuerza para desgarrar presas grandes, por lo que tiene la costumbre de "empalar" sus capturas en arbustos o árboles espinosos, para despedazarlos tirando luego de ellos. También puede utilizar estos enclaves como despensas, especialmente en invierno y durante la época de cría.
Desde su atalaya preferida esperara el paso de cualquier animalillo, para darle caza y en caso de no poder tragárselo de un bocado, llevárselo a un espino, alambrada metálica o similar para despedazarlo hincándolo entre los pinchos, e incluso dejarlo allí a modo de despensa si su apetito en ese momento esta satisfecho.
Las llamadas despensas son utilizadas sobre todo en invierno, donde el ave hace acopio de alimento y disponer de él cuando sea necesario.
No obstante durante la época de cría no es difícil encontrar alguna de estas despensas, donde por lo general solo encontraremos trozos de su caza, ya que el resto se lo esta llevando a los pollos hambrientos.
El hecho de utilizar arbustos o árboles espinosos para empalar allí sus presas viene dado a que a pesar de tener sus garras ciertamente desarrolladas, es incapaz de agarrar a su víctima con ellas a modo de una rapaz al carecer de la fuerza suficiente para desgarrar su pieza conjugando su potente y ganchudo pico con sus patas.
Por lo general empalan sus presas por la cabeza en un pincho del matorral y una vez hincado con fuerza tira de él hasta despedazarlo engullendo entonces los pedazos.
Es conocido su especial predilección por los escorpiones, siendo todo un ritual su captura. Cuando localiza uno de estos venenosos arácnidos de cola larga y punta ponzoñosa, lo primero que hace es bailarle alrededor mientras espera el momento oportuno para desarmarlo de un certero picotazo en el peligroso aguijón. Una vez conseguido, la historia se acabó de un bocado.
El canto del Alcaudón real meridional es un trino seco, con tonos agradables que lo hacen fácilmente perceptible incluso a gran distancia. El vuelo de esta pequeña, pero robusta ave es ondulante, con pequeños y fuertes aleteos en ascenso hasta llegar a su posadero.
Su arte cinegético llega al punto de imitar el canto de ciertos pájaros para atraerlos hasta su posición a modo de reclamo.
Identificación realizada gracias a la colaboración de Hailstorm Project en .com
En: wikipedia.org y www.ecured.cu/
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